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  • Foto del escritorZector 51

Mascotas: 3 trucos para evitar la deshidratación de tus perros y gatos en esta temporada de calor


¿Disfrutas de la temporada de calor?, ¡nosotros también!, pero así como tiene sus ventajas, existen muchas razones para tener cuidado en esta época, especialmente si de nuestras mascotas se trata ya que existen muchas complicaciones que pueden poner en riesgo su salud.


Pues por si no fuera suficiente que los paseos no se pueden hacer durante las horas en las que los rayos del sol calientan el suelo, el riesgo de llenarse de pulgas y garrapatas también aumenta, aunado a ello la deshidratación es muy común desde la primavera y hasta terminar el verano.

Aunque esta es la temporada favorita de muchos, para los perros y los gatos no suele ser de esta manera, ya que los puede llevar a experimentar cuadros de golpes de calor y deshidratación, dos escenarios muy preocupantes y que requieren de atención médica inmediata por los síntomas que les pueden arrebatar la vida a tus mascotas.


Es por ello que en estos meses del año los veterinarios recomiendan estar más pendientes que nunca de los animales de compañía y buscar ayuda inmediata si se detectan signos como:

  • Saliva espesa o espumosa

  • Vómitos

  • Orina oscura

  • Ojos hundidos

  • Encías y mucosa labial secas

  • Jadeos

  • Dificultad para espirar

  • Aumento del ritmo cardíaco

  • Menor elasticidad en la piel

La buena noticia es que todo esto se puede evitar si en esta temporada de calor se siguen algunas recomendaciones y trucos de cuidados básicos y que hay que aplicar todos los días, así como asegurarse de que tanto los perros como los gatos puedan acceder a ellas de forma frecuente para procurar su bienestar.


Y es que además de tenerlos bien hidratados, resulta muy importante que tengan horarios estrictos para no tener un contacto directo con las altas temperaturas.


¡Cuidado con el agua!

El primero de los trucos se relaciona con el agua, pues durante la primavera y el verano que las temperaturas aumentan significativamente, lo ideal es colocar en varios lugares del hogar sus cuencos de agua, misma que siempre debe de estar limpia y fresca; para ello se puede estar cambiando constantemente, o bien, colocar hielos para mantenerla fría y no olvides que todos los días se tiene que lavar el recipiente del que beben. Otro aspecto que debes de cuidar es que estos platos no deben de estar en contacto con el sol para evitar que se calienten.


Intenta con snacks congelados

No hay nada más delicioso para los perros y gatos que probar alimentos y en esta época de calor una alternativa con la cual se pueden mantener frescos e incluso hidratados, además que recibirán muchos nutrientes, es el prepararles paletas de hielo o helados para mascotas.


Para estos casos lo ideal es primero consultar qué frutas o verduras son aptas para ellos y así cuidar de su salud, ya que muchas alternativas que no nos causan daño a los humanos resultan tóxicas para los animales. Por supuesto, para una mejor orientación puedes pedir el consejo de tu veterinario de confianza.


Limita los horarios de actividad de tus mascotas

Finalmente, durante esta temporada del año es muy importante cuidar los horarios de actividad de las mascotas, ya que esto puede prevenirles desde un golpe de calor hasta la deshidratación; sin embargo, según la especie son las recomendaciones.


Por un lado, los perros deben de salir a pasear por las mañanas o noches, que es cuando el clima les resulta más favorable y a la vez evita que las almohadillas de sus patitas resulten con quemaduras por lo caliente del asfalto, asimismo, al permanecer en casa lo ideal es que no gasten su energía en las horas más calurosas y por el contrario, hay que permitirles un buen descanso.


Mientras que para los gatos, quienes los dejan salir de casa deben procurar que no lo hagan durante la tarde que es cuando más calor hace, sino permitirles la salida durante las noches; en caso que las mascotas prefieran quedarse en casa, lo ideal es seguir todas las medidas anteriores y tenerlos en espacios ventilados (al igual que a los perros) así que evita encerrarlos, dejarlos en el exterior al rayo del sol y sin que se puedan cubrir de ellos, y abre las ventanas y puertas de todo el hogar para que tu mejor amigo pueda ir a los espacios más frescos que sólo él conoce.

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