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En este episodio de Divagando en la mente de… nos internaremos en conocer las enfermedades mentales más extrañas del mundo. Una de las enfermedades que más llama la atención es el Trastorno de Identidad Disociativo, mejor conocida como “personalidad múltiple”. Esta enfermedad se caracteriza por la existencia de dos o más identidades y lo más interesante es que cuando está una identidad presente no hay memoria alguna de la otra.
En el 90% de los casos la causa es un trauma infantil aunque también se ha asociado a traumas por experiencias en guerras. Entre otros síntomas, este trastorno presenta fuertes dolores de cabeza y constantes crisis de pánico.
En el cine se han realizado varias películas que tratan este tema, como son: “Dr. Jekyll y Mr. Hyde” dirigida por John S. Robertson basada en la novela de Stevenson; otra más, de 1976 fue “Sybil” dirigida por Daniel Petrie, basada en un caso real de la artista Shirley Ardell Mason y protagonizada por Sally Field.
Recientemente la película Fragmentado dirigida por M. Night Shyamalan en el 2017, presenta a tres chicas secuestradas por un individuo que padece múltiples personalidades.
Otra extraña enfermedad es la llamada “Síndrome de Cotard”. Este trastorno quien lo padece cree que está muerto. Algunos pacientes dejan de comer por creer que no tienen estómago y mueren de hambre, otros insisten en ser enterrados.
El famoso asesino serial Richard Chase padeció la enfermedad y comía solamente animales crudos pensando que eso le devolvería la sangre a su corazón.
El Síndrome de Capgras es otra rarísima enfermedad mental: quien lo padece cree que una persona cercana es reemplazada por un impostor idéntico a esa otra persona. Puede presentarse de forma aguda, transitoria o crónica. Se ha asociado especialmente con personas que padecen demencia. Se llama así en honor al psiquiatra francés que definió la enfermedad en 1923 al tratar a una paciente de 74 años que aseguraba que su marido había sido reemplazado por un doble.
Otra rara enfermedad es el Síndrome de Stendhal cuyos síntomas son ritmo cardiaco elevado, vértigo, confusión o temblores al observar alguna obra de arte o un lugar de gran relevancia histórica. Se llama así en honor del escritor francés ya que en su libro “Nápoles y Florencia: Un viaje de Milán a Reggio” describe esta condición. Fue descrito como síndrome en 1979.