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En medio de todos sus problemas personales y emocionales, Alejandro Sanz sumó otro de índole económica, pues fue sentenciado a pagar una gran suma millonaria. Un juzgado de Madrid acaba de condenarlo a hacer frente a un impago millonario en la compra de unas propiedades de lujo en Miami y prepara el embargo de sus bienes.
Una magistrada decretó la ejecución de una sentencia dictada contra el cantante por la Corte de Miami hace dos años, en la que se le condenaba a pagar 3 millones de euros a los que ahora tendrá que hacer frente con su patrimonio personal
Todo comenzó cuando Sanz decidió comprar dos lujosos inmuebles en Miami, pues, aunque pagó una parte, para liquidar el resto la entidad Total Bank de Florida le otorgó al cantante varios préstamos.
El problema radicó cuando el español ya no pudo pagar los préstamos, por lo que la entidad financiera pasó su deuda a un fondo de inversión estadounidense, que, al no llegar a un acuerdo con Sanz, comenzó un proceso de hipoteca para quedarse con las propiedades de Sanz y ponerlas a la venta y con eso pagar su adeudo.
La justicia americana dictó una primera sentencia el 28 de septiembre de 2020, en la que ya se reconocía la existencia de una deuda a nombre de Sanz que ascendía a 11.951.895 dólares. Por eso, se procedió a establecer una subasta de las lujosas viviendas.
Finalmente, el fondo de inversión logró vender los inmuebles en 9.475.367 dólares, pero aún quedaba una suma por cubrir, porque el español debía 11.951.895 dólares, así que se le demandó nuevamente por la cantidad faltante.
En la última parte del proceso, el fondo de inversión estadounidense le solicitó a un juzgado de España que reconociera la validez de la sentencia americana, en la que le pedían a Sanz saldar su adeudo.
Y ahora la justicia española ha respaldado esa sentencia y le ha pedido al cantante que responda con sus bienes en España para pagar los aproximadamente 3 millones de euros que le exigen para liquidar su adeudo.
La intención es embargar algunas marcas registradas del cantante, así como algunas de sus empresas, y confiscar una finca de Jarandilla de la Vera o un inmueble en Cádiz. Esto, ya lo determinarán las autoridades.
Hasta el momento, Sanz no se ha pronunciado sobre este fallo legal en su contra, que definitivamente es un revés que recibe en un momento en el que no se encuentra bien emocionalmente.
Y es que, aparte de lo legal, Alejandro enfrenta una situación personal complicada, pues hace poco se supo que terminó su relación de tres años con Rachel Valdés.
Aunado a eso, el cantante español también atravesó por un cambio de disquera, pues, tras estar 12 años en Universal, ahora está en las filas de Sony Music. El astro español, informo Billboard, firmó su nuevo contrato el pasado 13 de junio en Madrid.
“Feliz de unirme a la familia de Sony Music, una compañía donde tengo muchos amigos, con los que comparto el AMOR por la MÚSICA. Estoy seguro que juntos nos vamos a divertir haciendo lo que más nos gusta”, expresó Sanz.
Y aunque Sanz ha indicado que ya se siente mejor, sus fans se preocuparon mucho por los comentarios que hace poco hizo en sus redes sociales.
“No estoy bien. No sé si esto sirve de algo pero quiero decirlo. Estoy triste y cansado. Por si alguien más cree que hay que ser siempre una brisa de mar o un fuego artificial en una noche de verano. Estoy trabajando para que se me pase… llegaré a los escenarios y algo dentro me dirá que hacer…
“…Pero a veces no quiero ni estar. Literalmente. Sólo por ser sincero. Por no entrar al ruido inútil. Sé que hay gente que se siente así. Si te sirve, yo me siento igual”, escribió el español, en Twitter, el pasado 26 de mayo.
Así, es evidente que Sanz está en medio de una crisis emocional, personal y económica, y todos esperan que, pese a lo que le está pasando, logre pronto salir adelante.