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Cada vez es más frecuente escuchar historias del pasado, sobre todo aquellas que tuvieron lugar en México; una de las que sigue generando dudas al respecto y que incluso tiene una película basada en este hecho real fue el robo al Museo Nacional de Antropología de México, el cual también fue conocido como “El robo del siglo en México”.
En este sentido, es importante recordar que este robo tuvo lugar en el complejo ubicado en Avenida Paseo de la Reforma, dentro de la colonia Polanco, en la primera sección del Bosque de Chapultepec, ubicado en la alcaldía Miguel Hidalgo en Ciudad de México, en la madrugada del 25 de diciembre de 1985.
Este acto fue cometido por dos estudiantes del Estado de México, Carlos Perches Treviño y Ramón Sardina García, quienes fueron capturados el 12 de junio de 1989 luego de que se realizaran las investigaciones pertinentes por parte de la Procuraduría General de la República. “El robo del siglo en México” Bajo este panorama, las personas a través de los años han cuestionado más a fondo este robo que en su momento fue noticia nacional, ya que lograron saquear alrededor de 140 piezas arqueológicas de la colección del recinto que hasta la fecha presenta su exposición permanente y algunas temporales. De acuerdo con el escritor e historiador mexicano Enrique Florescano, el dúo de cómplices de dicho robo, sustrajeron del lugar 140 piezas de las salas “Maya”, “Mexica”, “Culturas de la Costa del Golfo de México” y “Culturas de Oaxaca”, de las cuales destacaron: El ajuar funerario de K'inich Janaab' Pakal incluidas la máscara, collares, pulseras y anillos; también robaron el Pectoral del Dios murciélago, la vasija conocida como el Monito de obsidiana y el chimalli de oro y turquesa de la Tumba 7 de Monte Albán.
Intentaron vender las piezas Cabe señalar que Treviño y Sardina García, en aquella época estudiaban veterinaria en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quienes radicaban en Jardines de San Mateo y Ciudad Satélite en Naucalpan, y que asistieron alrededor de cincuenta veces durante seis meses antes del robo para analizar las medidas de vigilancia para crear la estrategia ideal para extraer las piezas del museo.
De hecho, en diversas ocasiones se ha señalado que Isabel Camila Masiero, mejor conocida como "La princesa Yamal", estuvo involucrada, pues en ese momento, la vedette mantenía una relación sentimental con José Ramón Serrano, un amigo cercano a Carlos Perches y Ramón Sardina, quienes fueron responsables autores intelectuales del tan conocido crimen.
Con el paso del tiempo, la vedette logró comprobar su inocencia de dicho evento, aunque a través del tiempo se le sigue recordando como parte de dicho acontecimiento que paralizó a México.
Por otro lado, vale la pena señalar que cuando los hombres fueron capturados por las autoridades, las piezas fueron devueltas al museo; los responsables en su momento intentaron vender cada una de ellas, pero fracasaron.