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Isabel Vargas Lizano, mejor como Chavela Vargas nació en San Joaquín, Costa Rica el 17 de abril de 1919, pero gran parte de su vida y éxito musical radicó en México pues siempre vivió un rechazo hacia su persona y su carrera musical; sus últimos años de vida los pasó en una la propiedad antes conocida como “Quinta Monina” ubicada en Tepoztlán, Morelos.
Tras su retiro de los escenarios en los años 90, decidió alojarse un tiempo en España en donde también fue aclamada y bien recibida por la comunidad del gremio artístico tanto musical como actoral y cinematográfico, particularmente por el productor, escritor y director de cine, Pedro Almodóvar, quien la acompañó prácticamente durante sus últimos años de vida.
Precisamente en su más reciente libro “El último sueño”, Almodóvar narra en un capítulo entero, su experiencia y relación con la famosa cantante costarricense, con quien creó un fuerte vínculo; en este texto señaló que la voz de Vargas era única e irrepetible.
Pero también señaló que le habría gustado conocer “El alacrán”, un popular bar de los años 50 en donde se vivían diversos espectáculos dentro del escenario, desde el mundo del cine, el teatro, la televisión, y por supuesto, la música, en donde precisamente Chavela Vargas debutó, luego de haber mostrado su talento en las calles de la Ciudad de México.
El bar "El alacrán" donde apareció con Tongolele
Además, en este mismo lugar donde debutó, participó en el escenario la famosa actriz de la época del cine de oro, Yolanda Yvvone Montes Farrington, mejor conocida dentro del gremio artístico como “Tongolele” quien se distinguía por sus bailes icónicos, además de desempeñarse como actriz y vedette.
En el capítulo titulado “Adiós, volcán”, el reconocido cineasta de películas como “Madres paralelas”, “Volver” y “Tacones Lejanos” agregó que creó un fuerte vínculo con la intérprete de “Llorona”, y que incluso llevaron su relación profesional a algo más “íntimo”, ya que la reconocida cantante le decía que él era su “esposo de esta vida”.