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Conoce las tendencias que están viviendo los jóvenes de todo el mundo en sus relaciones afectivas.
El 45% de los jóvenes españoles confiesa tener un "follamigo". ¿Qué es esto? Pues es un amigo con quien practica sexo en ciertos momentos o en las épocas que no tiene pareja.
Además, el 30% afirma que recurrió a los consejos de sus amigos para orientarse en los inicios de su vida sexual. Pero esta confianza en los más próximos se rompe cuando se trata de hablar de las fantasías sexuales: el 62,6% dice que nunca las compartiría con un amigo.
El estudio fue realizado por la firma Control. La muestra incluyó más de 2.000 hombres y mujeres de entre 18 y 35 años.
Sobre el nivel de secreto que se conserva para las fantasías, es posible que esté relacionado con el hecho de que hasta un 15,3% haya confesado que, a la hora de probar cosas nuevas en la cama, lo que le gustaría es tener relaciones con la pareja de un amigo.
Aunque por otro lado, probar nuevas posturas (76,4%) o tener sexo en sitios públicos(48%) son las fantasías que encabezan el ranking.
También se obtuvo que el 64% de los jóvenes encuestados le da un lugar muy importante al sexo. De aquí también se desprende que solo un 20% afirma dar el primer paso en la cama.
Otros resultados interesantes tienen que ver con que al 67% le resulta indiferente quién lleve la iniciativa a la hora de las relaciones íntimas, y tan solo un 13% admite que aguarda a que el otro la tome.
El estudio realizado por la firma de preservativos también indagó sobre los aspectos en los que se fijan las personas cuando están ligando. El 29,9% alegó que se fija primero en los ojos. Un porcentaje muy similar, el 29,8% dice que lo hace en la sonrisa, y un 13,6% admite que el trasero es lo primero en lo que se fijan.
Algunos datos obtenidos resultan un poco alarmantes, como por ejemplo, una parte importante de los jóvenes no se preocupa en exceso por mantener relaciones sexuales seguras. Casi ocho de cada diez encuestados afirma no conocer el estado de salud sexual de sus parejas, pese a que el preservativo es utilizado por un 68% de los jóvenes como método anticonceptivo, tres de cada diez afirma que lo usa solo ocasionalmente, y un 13% confiesa que sigue empleando la ‘marcha atrás’ como método de prevención.