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Dave Grohl, el vocalista de Foo Fighters, dijo a “The Howard Stern Show” que ha estado leyendo los labios durante 20 años porque se daña la audición en los conciertos.
El exbaterista de Nirvana e integrante de Foo Fighters reveló previamente que se estaba quedando sordo del oído izquierdo por las décadas de actuación en el escenario.
Grohl dijo a Stern que la pandemia del Covid-19 ha dificultado la comunicación con la gente porque está acostumbrado a leer los labios.
“Eso es lo peor de esta pandemia, es como si la gente usara máscaras”, dijo Grohl. “Llevo leyendo los labios como 20 años, así que cuando alguien se me acerca son como (ruidos ahogados). Yo digo: ‘Soy un músico de rock. Estoy sordo. No puedo oír. ¿Qué estas diciendo?’”
El músico también dijo en la entrevista que tiene tinnitus, un zumbido persistente en los oídos. Aunque lo padece en ambos oídos, el daño es peor en el izquierdo por los años que ha tocado la batería.
Dave Grohl agregó que aunque no podía escuchar bien a las personas cuando estaban sentadas a su lado en un restaurante lleno de gente, su audición era excelente cuando se trataba de crear música nueva.
“Puedo escuchar las cosas más pequeñas”, dijo Grohl. “Dentro de la mezcla, puedo escuchar los detalles de todo lo que le hemos hecho a esa canción como realmente puedo”.
Grohl también afirmó que se niega a usar audífonos, que pueden proteger sus oídos, porque lo alejan “del sonido de la atmósfera natural” y no puede escuchar a sus compañeros de banda.
“Quiero escuchar a la audiencia frente a mí y quiero poder darme la vuelta y escuchar a Taylor (Hawkins) allí mismo. Luego moverme y escuchar a Pat (Smear), escuchar a Chris (Shiflett) y cosas así”, dijo Grohl. “Interfiere con tu comprensión espacial de dónde estás en el escenario”.
De acuerdo con el músico, Ian Beveridge ha sido su ingeniero de audio durante 31 años y es quien se asegura de que el sonido sea perfecto para él.
“Así que no estoy ahí arriba solo recibiendo patadas en el trasero por algunas cosas ruidosas”, explicó.
“Suena genial y simplemente no me gustan las cosas en el oído. Además, tengo pequeños agujeros en los oídos y esas cosas cuando las pongo, simplemente se salen y no quiero parecer una mantis religiosa con estas cosas en mi cabeza”, añadió. “Quiero salir y volverme loco”.